Consecuencias de no beber agua

La ingesta inadecuada de agua conlleva a la deshidratación. Si bien la etiología de la deshidratación es multifactorial, una de las principales causas de deshidratación es el insuficiente aporte de líquidos.

En condiciones normales el cuerpo humano mantiene constante el balance hídrico a través de diferentes mecanismos que regulan el ingreso y egreso de agua. El aporte de agua exógena (a través de la ingesta de agua como bebida y el agua contenida en los alimentos) y la eliminación (a través de la orina, heces, piel y respiración) representan dichos mecanismos. Por lo expuesto, si éstos fallan se producen alteraciones en el balance de agua que conllevan al individuo a la deshidratación.

Los niños menores de 1 año constituyen junto a los adultos mayores, grupos de riesgo de sufrir deshidratación debido a ciertas características fisiológicas. Deshidratación en lactantes ¿Cómo prevenirla?

Prevención de la deshidratación

Para prevenir la deshidratación es importante ingerir suficiente cantidad de líquido diariamente. 

Uno de los interrogantes al respecto se relaciona al tipo de bebida elegida. El agua segura hidrata. Las bebidas azucaradas aportan líquido, pero también azúcar o sustancias artificiales.

Entonces, para promover una adecuada hidratación y prevenir las consecuencias de no tomar agua se recomienda consumir suficiente cantidad pura y disminuir el consumo de bebidas azucaradas.